Ahorrar a largo plazo en oro ¿es buena idea?

Durante siglos de historia el ser humano ha usado el oro como moneda, y en menor medida otros metales como la plata. En los últimos siglos se crearon las divisas en papel (dólar, libra). Si bien se dejó de pagar con oro físico, lo cierto es que estas divisas estaban respaldadas por oro. En la actualidad pagamos con monedas fiduciarias que están completamente desligadas del oro.

Aquí es donde se plantea el debate: ¿ha dejado de ser el oro una buena moneda? Al fin y al cabo miles de generaciones lo han usado sin ningún problema y el oro ha cumplido su función: ser un depósito de valor perdurable en el tiempo.

En contraposición, las nuevas monedas fiduciarias (euro, dólar, libra, yen) cuentan con muchas características propias de una buena moneda (difícilmente falsificables, ampliamente aceptadas por todos...) pero carecen de una propiedad indispensable: conservar su valor y poder adquisitivo en el largo plazo.

Tras esta más o menos breve introducción, vamos a ver las ventajas de invertir y ahorrar en oro a largo plazo.

  1. El oro es muy líquido. Líquido no en el sentido de que como modo metal es fundible y puede acuñar nuevas monedas. Es líquido según la propia definición económica, es decir, es ampliamente aceptado por todos.

  2. A penas se extrae un 2% anual de oro procedente de minas sobre el stock ya existente. Esto es muy importante, porque al no poderse crear oro de la nada, es una garantía de que el oro que ahorremos hoy seguirá teniendo el mismo poder adquisitivo dentro de 10, 20 ó 50 años. Esta es sin duda la mejor ventaja del oro para un ahorrador.

El oro no es perfecto, y estas son algunas de sus desventajas:

  • El coste de atesorarlo: si tienes pocas monedas basta con guardarlas en una hucha en casa. ¿Pero qué pasa si son los ahorros de toda una vida? Tendrás que pagar una caja fuerte con todo lo que eso conlleva.

  • Densidad de valor alta. Una moneda de 2 euros pesa 8,50 gramos. Una moneda de oro con ese mismo peso tendría un valor de 300 euros, es decir, una densidad 150 veces más alta. A pesar de esto existe un problema: el transporte. Y es que la banca actual es capaz de realizar transferencias instantáneas con simples apuntes contables, pero no sucede lo mismo con el oro.

  • ¿Es ampliamente aceptado? Sin duda alguna, todo el mundo reconoce el oro cuando lo ve, pero no esperes que te lo admita el cajero del supermercado al pagar la compra. El oro es líquido, en esto estamos de acuerdo, pero las divisas oficiales lo son más aún.

Ahora que ya sabemos las ventajas y desventajas del oro, vamos a ver qué conclusiones podemos sacar de todo esto.

Ahorrar con oro, ¿sí o no?

Puedes hacerlo. Pero ten en cuenta una cosa. Sólo conservarás el poder adquisitivo. Tenerlo guardado en una caja fuerte durante 10 años no hace que las monedas críen más.

Por tanto, es bueno para ahorrar y no perder poder adquisitivo, pero no para invertir. ¿Y por qué no para invertir? Muy sencillo, varios ejemplos:

  • Alquilar un piso: si inviertes en un piso para alquilarlo, percibirás una renta. Es decir, invertir en pisos, a largo plazo, te acabará pagando otro piso.

  • Invertir en acciones que paguen dividendo: igual que el anterior, el hecho de cobrar dividendo hará que tu riqueza aumente y podrás comprar más acciones.

  • invertir en acciones de empresas sólidas en constante crecimiento: imagina que compras Coca Cola. En un mundo en el que cada vez más personas salen de la pobreza, ¿no crees que esas personas empezarán a beber Coca Cola y por tanto el valor de las acciones subirá acorde a su aumento de ventas y beneficios?

Conclusión

El oro es un buen activo para conservar el poder adquisitivo. No le afecta la inflación (IPC). Por el contrario, el oro se guarda en una caja fuerte y no produce nada.

Por tanto, no crees que ahorrar a largo plazo es mejor si inviertes en empresas sólidas, con ventajas competitivas y que estén en constante crecimiento conquistando nuevos mercados?